La crisis que afecta al Hospital Central de Maracay por la falta de suministros médicos y material quirúrgico ha obligado a los especialistas médicos del hospital principal del estado de Aragua a solicitar expresamente la intervención de la Iglesia Católica.
 
Los médicos han preparado una petición para al Papa Francisco y para el obispo de la diócesis de Maracay, monseñor Rafael Ramón Conde Alfonzo, solicitando su intervención, y la han entregado al obispo, durante una reunión en la sede de la Diócesis que se celebró esta semana. Según la información enviada a la Agencia Fides, el Dr. Martín Graterol, traumatólogo, ha hecho de portavoz explicando que a través de sus cartas quieren expresar sus sentimientos y deseos de ver al Santo Padre y a Monseñor Conde interceder en favor de los pacientes, “para permitir lo más rápidamente posible y con la ayuda de Dios, que se solucione el grave problema de la falta de suministros médicos que tenemos en los hospitales”.
 
Monseñor Conde, al recibir las cartas, ha destacado la iniciativa de los venezolanos en el mundo dispuestos a iniciar una campaña de recogida de medicamentos para hacerlos llegar a la patria. Sin embargo, ha señalado, que el problema se resolvería pronto si el gobierno nacional permitiese que estos fármacos entrasen en el país, “ya que hasta ahora el obstáculo ha sido la prohibición del gobierno a aceptar la ayuda exterior”.
 
Luego ha definido la situación “muy desagradable”, y ha recordado que la organización internacional de Cáritas quiere actuar como un instrumento de mediación, para que los recursos necesarios lleguen al país y sean distribuidos de manera uniforme en función de las necesidades y bajo un control efectivo. “Confiamos en que el corazón de los gobernantes no sea tan duro como para mantener la prohibición de la entrada de las ayudas que nos ofrecen”, ha dicho para concluir el obispo de Maracay.