La Arquidiócesis de Filadelfia (Estados Unidos) ha enviado una carta a los obispos de América Latina en la que señala que asumirá los gastos de dos parejas de esposos de cada país de la región para que participen del VIII Encuentro Mundial de las Familias (www.worldmeeting2015.org) que se realizará del 22 al 27 de septiembre de 2015.
En la misiva enviada a los prelados latinoamericanos, el Arzobispo de Filadelfia, Mons. Charles Chaput, invita a los obispos a participar en este importante evento y señala que la arquidiócesis que dirige “proveerá el transporte y el alojamiento de dos parejas de esposo y esposa de cada Conferencia Episcopal de América Latina y la región del Caribe”.
Hay que detallar que aunque muchos países tienen una sola Conferencia Episcopal, hay casos particulares. Por ejemplo, la "Conferencia Episcopal de las Antillas" incluye 19 diócesis que pertenecen a 13 países independientes (Antigua y Barbuda, Jamaica, Belice, Trinidad y Tobago...), 6 colonias británicas, 3 departamentos franceses y 6 territorios holandeses. De todos estos lugares, Filadelfia financiaría 2 matrimonios (un total de 4 personas) ya que comparten una sola Conferencia Episcopal.
Tras señalar que el Arzobispo Carlos Aguiar Retes ha aceptado coordinar esta iniciativa junto con el personal del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), que preside, Mons. Chaput recuerda que el tema del Encuentro, decidido por el Papa Francisco, será “El amor es nuestra misión: la familia llena de vida”.
“Es mi esperanza que este encuentro nos infundirá un nuevo vigor al ayudar a las familias a enfrentar los desafíos que encuentran diariamente y al regocijarnos con ellas en la vocación a la que Dios las ha llamado”, añade.
Tras señalar que Filadelfia tiene una gran importancia para la vida y la Iglesia de Estados Unidos, el Arzobispo señala que la Iglesia local “está agradecida por esta bendición (el Encuentro Mundial de las Familias) que permitirá una profundización de la comprensión de las enseñanzas de Cristo y la Iglesia sobre el matrimonio y la familia y su papel esencial en la vida de la sociedad”.
“Rezo para que esto refuerce los lazos de solidaridad entre las iglesias locales de las Américas”, concluye el Prelado.