El obispo de la localidad paraguaya de Misiones, Melanio Medina, había rechazado duramente un decreto que liberó la importación de semillas transgénicas, lo que motivó la reacción del jefe de Estado, Federido Franco.

El presidente de Paraguay Federico Franco interrumpió este jueves una homilía del obispo de Misiones, monseñor Melanio Medina, para sentar su postura ante las duras críticas lanzadas por el prelado contra un decreto que liberó la importación de semillas transgénicas.

"¿Usted cree, monseñor, que si los transgénicos van a perjudicar la salud y el ambiente, yo haría algo parecido?", dijo el jefe de Estado luego de pedir la palabra para defenderse de las críticas que el prelado había expresado en su homilía.

El incidente se produjo en medio de un oficio en la Iglesia parroquial de Villa Florida, Misiones, distante a unos 250 km al sureste de Asunción, durante la celebración del 130 aniversario de fundación de la población, en presencia de enviados de medios que cubren la presidencia.

Previamente, el prelado advirtió que el gobierno debe estudiar mejor antes de ingresar las semillas transgénicas destinadas a la producción de maíz y algodón, las últimas cuya importación fueron autorizadas por decreto.

Medina dijo tener informaciones de que los transgénicos "son perjudiciales para la vida y el ambiente" y que "pueden causar la muerte".

"Me permite, voy a explicar monseñor", interrumpió Franco, para sorpresa de todo el gentío en la concurrida celebración.

El gobernante subió al púlpito, tomó el micrófono y le planteó al religioso "si me presenta un documento científico o de un entendido que demuestre que los transgénicos causan daño, voy a rever mi postura".

Franco firmó el 20 de agosto un decreto de importación libre de tales semillas, duramente criticada por políticos allegados al ex presidente Fernando Lugo, destituido el 22 de junio pasado.

Tras explayarse por espacio de unos 4 minutos, dijo que "Dios y la ciencia permitieron que estas semillas sean modificadas para beneficio de los productores, resistentes a las plagas y las malezas", enfatizó el presidente.

En declaraciones a periodistas, al finalizar la misa, Medina dijo no estar molesto por la interrupción de Franco.

"Es normal aquí en Villa Florida que las misas sean dialogadas y que la gente participe, eso es algo totalmente válido y a mí no me molesta", expresó.