La Iglesia Católica y el Estado han llegado en Bolivia a un acuerdo en el sector de la educación.

El gobierno reconoce la estructura educativa de la Iglesia Católica, a través de las delegaciones de cada jurisdicción y los centros educativos de la Iglesia, según el comunicado que envió la Conferencia Episcopal de Bolivia a la Agencia Fides. El acuerdo permite a la Iglesia designar al personal de las instituciones educativas dependientes de ella, con el fin de garantizar la identidad de estos centros.

Del mismo modo, el Estado reconoce que la Iglesia puede nombrar a los profesores de religión en los centros de educación pública allí donde las familias pidan una educación religiosa católica. Algo que en España los grupos laicistas y algunos tribunales comienzan a cuestionar, al menos cuando se produce una destitución por la incoherencia entre la doctrina que el maestro debe transmitir y su vida personal.

El acuerdo entra la Iglesia y el Estado bolivianos fue firmado el lunes 28 de noviembre por Óscar Aparicio, secretario general de la conferencia episcopal y obispo auxiliar de La Paz, y Roberto Aguilar, ministro de Educación de Evo Morales.