Un sacerdote de una parroquia en Colombia denunció que el pasado lunes unos desconocidos ingresaron al templo, hurtaron dinero, abrieron el Sagrario, sustrajeron las hostias consagradas que posteriormente fueron arrojadas al suelo, rociadas con cerveza y pisoteadas.
El padre Rodrigo Hurtado, párroco del templo San Isidro al que pertenece la capilla Cristo Salvador, del barrio Los Cámbulos de Dosquebradas fue quien hizo la denuncia que recoge la prensa colombiana.
Según una radio local, años atrás esa misma capilla había sido blanco de otro acto sacrílego, cuando desconocidos quebraron las manos de una imagen de la Virgne María y hurtaron elementos de la capilla.
La diócesis de Pereira a la que pertenece el templo profanado ordenó su cierre y el retiro del Santísimo así como la excomunión para los responsables del hecho. La normalidad retornará a la capilla de Cristo Salvador sólo dentro de un mes cuando se realice un acto de desagravio, como lo indica la legislación canónica.