¿Pedirán perdón los obispos mexicanos por la conquista de México? Cabrera López parece apoyarlo

¿Qué culpa tienen los obispos mexicanos de 2020 de las barbaridades -reales o no, habría que concretar cada caso- cometidas por los conquistadores españoles en las distintas etapas de la conquista de México?

El actual presidente mexicano, el populista de izquierdas Andrés Manuel López Obrador, pidió hace ya un par de años, y ha reiterado ahora, que la Iglesia (y la monarquía española) se discupe por los abusos cometidos durante la conquista de América hace 500 años.

Desde la Monarquía española ni se le ha respondido y varios obispos mexicanos hasta ahora le respondían que más bien debía él pedir disculpas por crueldades más recientes cometidas por el Gobierno mexicano contra los cristianos. Aún hoy México sigue siendo un de los pocos países con régimen laicista (junto con Francia y Turquía).

Pero ahora el presidente de los obispos mexicanos y arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera, ha sugerido que en 2021, al cumplirse 500 años de la caída de Tenochtitlán, los obispos podrían ofrecer una disculpa.

López Obrador lo ha pedido al Papa también

López Obrador reiteró recientemente su exigencia al Papa Francisco para que pida perdón a nombre de la Iglesia Católica a través de una carta llevada al Vaticano por su esposa, Beatriz Gutiérrez Müller, el 10 de octubre. En su carta, el Presidente de México dijo al Santo Padre que “tanto la Iglesia Católica, la Monarquía española y el Estado Mexicano debemos ofrecer una disculpa pública a los pueblos originarios que padecieron de las más oprobiosas atrocidades para saquear sus bienes y tierras y someterlos”.

Miguel Ángel Alba Díaz, obispo de La Paz, en Baja California Sur (México), respondió a López Obrador señalando que el Gobierno de México debe pedir “perdón por hechos más recientes, que pida perdón por las leyes, por la Constitución del ‘17 y la Ley Calles, que violaron la libertad religiosa del 90% de su población, de sus propios ciudadanos, que obligaron a los cristianos a vivir en la clandestinidad”.

“Que pida perdón por todos los que fueron asesinados sumariamente por las autoridades durante la Cristiada”, dijo el prelado, recordando los crímenes cometidos durante la Guerra Cristera a inicios del siglo XX contra los campesinos cristianos y numerosos clérigos.

Cabrera López: "haremos un pronunciamiento"

En conferencia de prensa el 15 de octubre, el arzobispo Cabrera López dijo que “honestamente no sé si el Papa dirá alguna palabra de esta solicitud de la carta. Lo que yo sí puedo decir como presidente de la Conferencia Episcopal que nosotros sí haremos un pronunciamiento, un comunicado a tiempo, sabiendo que la fecha para hacerlo es el año próximo, 2021, que se cumplen los 200 años de la consumación de la independencia”.

“Por supuesto que personas e instituciones debemos saber pedir perdón”, comentó el arzobispo. Señaló que “los pueblos originarios tienen una larga historia de sufrimiento. No solo fue el inicio de la conquista sino a lo largo de todos los siglos y hasta el día de hoy sigue habiendo mucha laceración a sus derechos”.

“La Iglesia Católica en México está dispuesta siempre no solamente a pedir perdón sino a tener una memoria siempre penitencial a seguir en este camino de reconciliación”, dijo.

El Presidente de la CEM recordó que “los Papas ya lo han hecho en su momento”, pero “nos toca a nosotros también en este momento asumir esta responsabilidad”.

"Las instituciones de gobierno también son herederos"

“Del Papa no sé si sea necesario que responda o no, pero la Iglesia Católica en México por supuesto que quiere siempre refrendar esa petición al pueblo y desde luego que la tenemos que hacer todas las instituciones: las instituciones de gobierno que también son herederos, aunque tomaran distancia, son herederos del pasado, como nosotros también somos herederos de un pasado que tenemos que meditar, que tenemos que interpretar y sobre todo tenemos que cambiar”, señaló.

“Sin duda que hay acontecimientos dolorosos, trágicos”, indicó, como “la conquista de Tenochtitlan”, la actual Ciudad de México.

“Pero también en estos tiempos recientes en México hay asuntos que lastiman la mirada, que oscurecen el panorama. Ahí está el caso de Ayotzinapa. Y así podríamos enumerar muchos otros acontecimientos que han roto la comunión, la comunidad humana”, dijo, recordando la desaparición de 43 jóvenes en la localidad de Ayotzinapa en el Estado de Guerrero en 2014.

"No podemos tener una mirada farisaica: 'los malos fueron antes y los buenos estamos ahora'. No, no, todos tenemos que asumir nuestra propia responsabilidad”, añadió.