Secuestran en Michoacán a Alfredo López Guillén, sacerdote de 43 años, y a un joven de 16
El gobernador de Michoacán (México), Silvano Aureoles, informó este jueves de la desaparición del párroco José Alfredo López Guillén.
El sacerdote, de 43 años, y un muchacho que le acompañaba están en paradero desconocido desde el lunes, pero no fue presentada la denuncia hasta el miércoles.
Según explicó el gobernador Aureoles al periodista Joaquín López-Dóriga, el lunes el párroco se encontraba con un joven de 16 años en el municipio michoacano de Puruándiro. Pidieron alimentos a domicilio, "tortas y refrescos" y después de eso ya no se supo más de ellos.
Según fuentes de la investigación, los responsables de la desaparición se llevaron un vehículo y un teléfono móvil, que el gobernador confía los acerque al sacerdote y el joven.
Violencia en México, también contra sacerdotes
Michoacán, en el centro de México, se ve azotada por las mafias del narcotráfico y cuenta con grupos de autodefensa ciudadana desde 2013 que actúan al margen de las autoridades.
La Conferencia del Episcopado Mexicano confirmó la desaparición del cura michoacano y expresó que la iglesia vive un momento de mucha tensión tras los ataques recientes. En la última década 40 clérigos han sido asesinados en México, sobre todo en los estados de Guerrero, Veracruz, Michoacán, la Ciudad de México y Chihuahua.
Un hombre austero, estudioso y reflexivo
José Alfredo López Guillén, el cura secuestrado en Puruándiro, no fuma ni bebe alcohol y no le gustan las cosas caras ni ostentosas, según sus compañeros de seminario declaran en El Universal.
Es amante de la lectura y entregado al estudio y a la oración. Reflexivo y paciente, es algo reacio al deporte, aseguran. Mide 1.65 de estatura y tiene complexión media y tez blanca.
Párroco de la Santísima Trinidad de Janamuato desde hace un año, se ordenó el 7 de junio de 2001 en la Catedral de Morelia: ha cumplido, pues, 15 años de vida sacerdotal. Estuvo como párroco en Eménguaro, municipio de Salvatierra, Guanajuato, y en la Parroquia de la comunidad La Luz, en Puruándiro.
El cardenal Súarez, en un vídeo, pide por él
En un vídeo publicado en la cuenta de la Arquidiócesis de Morelia-Michoacán, el cardenal arzobispo Alberto Suárez Inda ora por el secuestrado. Dice que el párroco fue sacado de la iglesia este lunes por un grupo de desconocidos, que también se llevaron su automóvil y sus pertenencias personales.
El cardenal Suárez Inda pide en el vídeo a Dios por el sacerdote. "Ahora sufrimos en carne propia la angustia de la desaparición, el secuestro, de uno de nuestros sacerdotes, el párroco José Alfredo López Guillén, que el lunes fue sacado de la casa parroquial. Pedimos que pueda volver pronto al ejercicio de su ministerio".
El sacerdote, de 43 años, y un muchacho que le acompañaba están en paradero desconocido desde el lunes, pero no fue presentada la denuncia hasta el miércoles.
Según explicó el gobernador Aureoles al periodista Joaquín López-Dóriga, el lunes el párroco se encontraba con un joven de 16 años en el municipio michoacano de Puruándiro. Pidieron alimentos a domicilio, "tortas y refrescos" y después de eso ya no se supo más de ellos.
Según fuentes de la investigación, los responsables de la desaparición se llevaron un vehículo y un teléfono móvil, que el gobernador confía los acerque al sacerdote y el joven.
Violencia en México, también contra sacerdotes
Michoacán, en el centro de México, se ve azotada por las mafias del narcotráfico y cuenta con grupos de autodefensa ciudadana desde 2013 que actúan al margen de las autoridades.
La Conferencia del Episcopado Mexicano confirmó la desaparición del cura michoacano y expresó que la iglesia vive un momento de mucha tensión tras los ataques recientes. En la última década 40 clérigos han sido asesinados en México, sobre todo en los estados de Guerrero, Veracruz, Michoacán, la Ciudad de México y Chihuahua.
Un hombre austero, estudioso y reflexivo
José Alfredo López Guillén, el cura secuestrado en Puruándiro, no fuma ni bebe alcohol y no le gustan las cosas caras ni ostentosas, según sus compañeros de seminario declaran en El Universal.
Es amante de la lectura y entregado al estudio y a la oración. Reflexivo y paciente, es algo reacio al deporte, aseguran. Mide 1.65 de estatura y tiene complexión media y tez blanca.
Párroco de la Santísima Trinidad de Janamuato desde hace un año, se ordenó el 7 de junio de 2001 en la Catedral de Morelia: ha cumplido, pues, 15 años de vida sacerdotal. Estuvo como párroco en Eménguaro, municipio de Salvatierra, Guanajuato, y en la Parroquia de la comunidad La Luz, en Puruándiro.
El cardenal Súarez, en un vídeo, pide por él
En un vídeo publicado en la cuenta de la Arquidiócesis de Morelia-Michoacán, el cardenal arzobispo Alberto Suárez Inda ora por el secuestrado. Dice que el párroco fue sacado de la iglesia este lunes por un grupo de desconocidos, que también se llevaron su automóvil y sus pertenencias personales.
El cardenal Suárez Inda pide en el vídeo a Dios por el sacerdote. "Ahora sufrimos en carne propia la angustia de la desaparición, el secuestro, de uno de nuestros sacerdotes, el párroco José Alfredo López Guillén, que el lunes fue sacado de la casa parroquial. Pedimos que pueda volver pronto al ejercicio de su ministerio".
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