Instituciones católicas de acogida infantil alertan de una directriz de Unicef que puede cerrarlas

Desde 2012, la Red Latinoamericana de Acogimiento Familiar (Relaf) y su principal socio estratégico, Unicef, están llevando a cabo la llamada Iniciativa regional para la erradicación de la internación de niños y niñas menores de tres años, que tiene como objetivo "colocar en la agenda pública de los gobiernos latinoamericanos la problemática de los niños menores de tres años que se encuentran viviendo en instituciones, y así lograr el reemplazo de la internación como medida prioritaria de cuidado por el cuidado en familias".

Se calcula que aproximadamente 240.000 niños y adolescentes, procedentes del abandono por parte de sus padres, viven en instituciones de acogida en América Latina.

Al año siguiente, en la XXIII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, la iniciativa logró el apoyo de Costa Rica, Honduras y Paraguay, tras una intensa campaña a la que se adhirieron organismos como el Movimiento Mundial por la Infancia de Latinoamérica y el Caribe, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, y la Representante Especial del Secretario General de la ONU sobre la Violencia contra los Niños.

Pero el deseo de buscar una familia de adopción para los niños que crecen en instituciones de acogida está provocando efectos dramáticos en algunas de ellas que podían presentar un excelente balance de resultados, obligándolas a cerrar pero sin dar una salida apropiada a los pequeños, que quedan desamparados.

Así ha sucedido con algunas instituciones católicas en Argentina y Chile, y ahora desde Guatemala han lanzado una alerta las Misioneras del Centro de Acogida Jesús Niño. Denuncian que algunas generalizaciones de la directriz de Relaf y Unicef (como que "por cada año que una niña o niño menor de 3 años vive en una institución pierden 4 meses de desarrollo" o que "los niños que crecen en instituciones tienen un peor desempeño, no sólo físico y cognitivo, sino en logros académicos") chocan con la realidad de hogares donde a los niños se les trata bien, se les alimenta, se les respeta y se les prepara para la vida con éxitos comprobados, como muestra el siguiente vídeo: