La Iglesia latinoamericana alerta del incremento de suicidios entre adolescentes
“Los jóvenes y adolescentes constituyen lo más preciado de un pueblo y deben ser una de las principales preocupaciones de todos los que tenemos alguna responsabilidad en su formación”, ha afirmado Mons. Torrado Mosconi, obispo auxiliar de Santiago del Estero (Argentina), en un mensaje en el que dirige un llamamiento a las familias y a la comunidad civil para afrontar la tragedia del incremento de los suicidios entre adolescentes. Solo el pasado fin de semana 5 chicos se han quitado la vida.
Mons. Torrado Mosconi subraya el papel de la educación en el proporcionar a los jóvenes valores positivos para afrontar las dificultades de la vida. “A los hijos se les muestra el cariño también diciéndoles que no a algunas de sus exigencias. Que Dios esté presente en los hogares a través de la oración cotidiana en familia, la valoración de las realidades espirituales y la paz en el hogar. Se ha de procurar inculcar los valores trascendentes que dan sentido al sacrificio y al sufrimiento por amor de un ideal”, ha escrito el obispo en el mensaje que hemos recibido en Fides.
“Lamentablemente son muchos los jóvenes que crecen sin consciencia de la presencia de Dios y sin religión. Sin esperanza, sin una adecuada contención familiar, sin verdaderos amigos, sin formación en la fe, sin la posibilidad de estudiar ni de trabajar. Son muchos los que quedan al margen de la sociedad y muchas veces son tratados como ´sobrantes´. Quieren escapar a su situación a través de la alienación de las adicciones o de excesos nocivos de todo tipo y, lamentablemente, a veces llegando al extremo del suicidio” concluye Mons. Torrado Mosconi.
Un informe de la Dirección General de Salud y Asistencia Social afirma que en Argentina el número de suicidios juveniles ha crecido de forma paralela al aumento de la violencia entre los adolescentes. También en Argentina, en el periodo 1991-2000 la mortalidad por suicidio ha aumentada del 1.5% al 6.1%, sobre todo en la franja de edad entre los 15 y 24 años. “Las enfermedades psico-sociales, la falta de metas, el consumo de drogas, la falta de modelos y valores, son elementos que desencadenan el suicidio”, afirma el informe argentino.
Comentarios