Multinacional abortista implicada en escándalos históricos
La hija de la presidenta de Planned Parenthood trabaja en la campaña de Hillary Clinton
El apoyo de Planned Parenthood –acusada recientemente de traficar con los órganos abortados en sus instalaciones– al gobernante Partido Demócrata de Barack Obama no se ciñe solo a lo económico. Ahora Lily Adams, la hija de la presidenta de la multinacional del aborto Cecile Richards, se ha enrolado como dirigente de la campaña presidencial de la ex secretaria de Estado Hillary Clinton.
Lily Adams, que con 27 años es la mayor de los tres hijos de Richards, se ha sumado a la campaña de Clinton como subdirectora de comunicaciones en el estado de Iowa. “Orgullosa miembro del equipo de Hillary para Iowa”, asegura en la biografía de su perfil en la cuenta en la red social Twitter. Antes de ingresar de lleno a la campaña de la ex primera dama de Estados Unidos, Adams fue subdirectora del Comité Nacional del Partido Demócrata.
Richards ha elogiado públicamente en una entrevista a la revista Elle en 2014 que su hija tiene “el ADN (para la política)”, así como “el material genético correcto”, destacando que Adams apoyaba desde su puesto en el Partido Demócrata a Planned Parenthood.
Iowa es uno de los estados en los que la industria del aborto ha invertido más dinero en los últimos años. Sin embargo la última senadora electa por ese estado fue la pro-vida Joni Ernst, precisamente quien presentó el proyecto de ley para cortar el financiamiento público a Planned Parenthood, que bloqueó el Partido Demócrata en el Senado de Estados Unidos el 3 de agosto.
El 3 de agosto, una semana después de reconocer que los videos que revelan el tráfico de órganos de bebés abortados por Planned Parenthood eran “perturbadores”, Hillary Clinton expresó su total respaldo a la multinacional del aborto.
“Estoy orgullosa de estar junto a Planned Parenthood. Nunca dejaré de luchar por proteger la capacidad y el derecho de cada mujer en este país a tomar sus propias decisiones de salud”, dijo Clinton en un video.
La relación entre Clinton y Planned Parenthood se puede rastrear hasta el primer gobierno de su esposo, Bill Clinton. De acuerdo a The Associated Press, en 1993 la multinacional del aborto habría invertido 10 millones de dólares en una campaña para promover en el Congreso que el aborto estuviera incluido en la cobertura de la reforma de salud que propuso ese año la entonces Primera Dama. Su esposo fue elogiado por Planned Parenthood ese mismo año como “el primer presidente pro-elección (pro-aborto) en 12 años”.
La organización pro-vida Susan B. Anthony List reveló en un informe que durante la gestión de Hillary Clinton como Secretaria de Estado –de 2009 a 2013– Planned Parenthood Federation of America “y sus afiliadas gastaron más de 3,3 millones de dólares en cabildeando agencias federales, incluyendo el Departamento de Estado y USAID (Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional), sobre varios temas y partes de legislación”.
Durante sus años como senadora, indicó el reporte del grupo pro-vida, Planned Parenthood Action Fund (el brazo de presión política de Planned Parenthood) otorgó un 100 por ciento de aprobación a Clinton en su tarjeta de puntuación de todos sus años en el parlamento. Además, durante los dos últimos años de Hillary Clinton como Secretaria de Estado de Barack Obama USAID otorgó más de 100 millones de dólares en financiamiento para Planned Parenthood Federation of America y para su matriz, la International Planned Parenthood Federation.
En 2014, Hillary Clinton recibió de Planned Parenthood el premio Margaret Sanger, llamado así por la fundadora de la organización.
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