Hoy el reto del amor es lanzar las estructuras por la ventana

07 junio 2015 00:00

Año del Señor 2015

Lerma, 7 de junio

Hola, buenos días, hoy Sión nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.

RUIDO

El otro día, a la hora de la siesta, estaba tranquilamente en mi cama, en ese maravilloso momento en que notas que empiezas a entrar en un magnífico, profundo y reparador descanso, cuando...

-¡¡¡BROOOOOOMMMMMM!!!

Del bote que pegué, casi acabo agarrada a las vigas del techo. ¡Qué susto! Las primeras que me vinieron a la cabeza en ese momento fueron nuestras tortugas.

"¿Será posible?", pensaba mientras me ponía las zapatillas, "¿Qué habrán tirado esta vez?"

Salí dispuesta a recordar a nuestras mascotas que, como sigan montando juerga a la hora del descanso, acabarán convertidas en sopa de tortuga. Sin embargo, todo estaba en orden, incluidas nuestras amigas, que estaban plácidamente esparrancadas en mitad del pasillo, mirándome con cara de absoluta inocencia. Y, entonces...

-¡¡¡BROOOOOOMMMMMM!!!

Me asomé a la ventana y, ¡misterio resuelto! Resulta que los obreros habían decidido lanzar las viejas estructuras de hierro por una ventana... ¡que da justamente hacia el Noviciado! Evidentemente, llevaban varios días desmontándolas y trabajando a esa hora, pero, como vivimos en un ala a parte del monasterio, no nos habíamos enterado del ruido antes...

Y, en la oración, Señor me mostró que este episodio ocurre todos los días. Sí, porque Él es el mejor arquitecto y, además, el mejor albañil. Él te mira, te ama tal y como estás hoy y, además, ve todas las maravillas que puede realizar en ti. Cristo siempre está trabajando, a veces, por dentro, en silencio, sin que se note nada... hasta que, de pronto, te hace ver que te está cambiando: que tus viejas estructuras, tus ideas sobre el amor, sobre esa persona, sobre esa situación... han salido por la ventana, y te ha regalado unas nuevas, relucientes, resucitadas.

Hoy el reto del amor es lanzar las estructuras por la ventana: ¡¡¡sorprender con Cristo!!! Seguro que para hoy tienes un plan más o menos perfilado... Pide a Cristo que te muestre cómo sorprender a los tuyos, cómo hacer algo que no se esperen, pero que les haga sentir que tu amor hoy se renueva. Puede que a veces lo haga en silencio... pero en este día, ¡¡que sea con ruido!! Un beso, un rato de juego con tus hijos, esa comida que sabes que tanto le gusta... ¡¡pídele a Cristo poder sorprenderles!! ¡Feliz domingo!

VIVE DE CRISTO

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