Maratón de misas semi-toleradas en un tanatorio laico por el obispo Fan, que pasó 30 años en prisión
Las autoridades civiles de Shanghai han dado el permiso a los católicos de la diócesis para celebrar misas por su obispo, José Fan Zhongliang, fallecido el 16 de marzo pasado.
Monseñor Fan, ordinario de Shanghai, era un obispo clandestino, no reconocido por el gobierno, que pasó 30 años prisionero en cárceles y campos de trabajo forzado, y los últimos 20, incluso ya anciano y enfermo, en arresto domiciliario.
En un primer momento las autoridades habían prohibido llevar a la iglesia el cuerpo y lo han llevado a un edificio donde se celebran habitualmente funerales laicos, aunque permitían en este caso el homenaje de los fieles de las 9 de la mañana a las 17 horas del martes y miércoles. Pero han permitido que en la sala se pudiesen celebrar misas.
Así que desde el martes en la casa funeraria se celebra una misa detrás de otra.
Y si bien la indicación del gobierno era de un funeral de bajo perfil, siempre hay una cantidad de gente y fieles de las comunidades oficiales como de las clandestinas que participan a las funciones.
Según un católico que ha participado, un sacerdote también ha rezado en público por Tadeo Ma Daqin, el actual obispo de Shanghai, que está arrestado en su domicilio desde junio de 2013, día de su consagración, por haber dimitido de sus cargos en la Asociación patriótica, la estructura gubernamental que controla a los católicos chinos.
El actual obispo de Shanghai, Tadeo Ma Daqin, arrestado a las pocas horas de su consagración como obispo
Los fieles han obtenido también que un catafalco fuese puesto en la catedral de San Ignacio (junto a la imagen del santo español fundador de los jesuitas), sede del obispo de Shanghai. También aquí se celebró una misa por monseñor Fan.
Monseñor Fan, ordinario de Shanghai, era un obispo clandestino, no reconocido por el gobierno, que pasó 30 años prisionero en cárceles y campos de trabajo forzado, y los últimos 20, incluso ya anciano y enfermo, en arresto domiciliario.
En un primer momento las autoridades habían prohibido llevar a la iglesia el cuerpo y lo han llevado a un edificio donde se celebran habitualmente funerales laicos, aunque permitían en este caso el homenaje de los fieles de las 9 de la mañana a las 17 horas del martes y miércoles. Pero han permitido que en la sala se pudiesen celebrar misas.
Así que desde el martes en la casa funeraria se celebra una misa detrás de otra.
Y si bien la indicación del gobierno era de un funeral de bajo perfil, siempre hay una cantidad de gente y fieles de las comunidades oficiales como de las clandestinas que participan a las funciones.
Según un católico que ha participado, un sacerdote también ha rezado en público por Tadeo Ma Daqin, el actual obispo de Shanghai, que está arrestado en su domicilio desde junio de 2013, día de su consagración, por haber dimitido de sus cargos en la Asociación patriótica, la estructura gubernamental que controla a los católicos chinos.
El actual obispo de Shanghai, Tadeo Ma Daqin, arrestado a las pocas horas de su consagración como obispo
Los fieles han obtenido también que un catafalco fuese puesto en la catedral de San Ignacio (junto a la imagen del santo español fundador de los jesuitas), sede del obispo de Shanghai. También aquí se celebró una misa por monseñor Fan.
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