Al grito "es un infiel" mata a rival de negocios; liberad al cristiano Mohamed; ¡indulto en Irak!

            En India. Según señala Asia News, en la ciudad de Juhu (Mumbai) la iglesia católica de San José ha sido profanada para robar los cálices y demás instrumentos de la liturgia realizados en plata y recubiertos en oro, mientras los ladrones tiraban por el suelo las hostias consagradas y se llevaban algunas. La policía no ha sido capaz de hallar a los culpables. Mons. John Rodrigues, Obispo auxiliar de Mumbai, celebró una misa de reparación, en la que pidió por “los que han cometido esta acción”.

 

            En Pakistán. Según recoge Assistnews, en Karachi, al grito de “estoy matando a un infiel”, el musulmán Mohammed Asif degolló a plena luz del día al cristiano Boota Masih, con el que mantenía una disputa de negocios, acusándole de haber proferido una blasfemia contra Mahoma. Entre las personas presentes se hallaban cuatro policías y varios guardias privados de seguridad, según ha denunciado el hijo George Masih. “Todo el mundo me dijo que mi padre no pronunció ninguna blasfemia como alega el asesino. Pero si mi padre era inocente, ¿por qué la gente se quedó parada mirando mientras le mataban?”. “Aun cuando mi padre hubiera dicho algo ofensivo contra el asesino, ¿era este le castigo que merecía?”. “Tras el asesinato de mi padre delante de tanta gente, queda claro que cualquier musulmán puede acabar con alguien alegando matarle por haber blasfemado”

 

            Sin salir de Pakistán. Según persecution.org., el pasado 4 de mayo, Zoya Mary, de 14 años de edad, fue secuestrada durante doce días por un grupo de musulmanes armados dirigidos por el propio tío de Zoya, convertido al islam por un imam radical que le intimó a realizar la acción. Utilizando a Zoya como rehén, el grupo reclamaba para su liberación la conversión al islam de la entera familia. En los doce días, Zoya fue violada, convertida en la segunda esposa de un musulmán y obligada a islamizar. Con una dolencia cardíaca congénita, Zoya sufrió un ataque, lo que llevó a sus captores a soltarla en la cuneta de una carretera. Zoya se recuperó y volvió con su familia, pero no terminaron ahí sus penalidades, porque entonces, su supuesto “ marido”, Ali Muhammad, reclamó la devolución de su esposa, llevando a juicio a los familiares a los que acusaba de haberla secuestrado. Tanto la conversión como el matrimonio forzado de Zoya son ilegales en Pakistán aunque sólo sea por no haber cumplido 18 años de edad, pero sus captores le habían obligado a firmar papeles declarando haberlo hecho.

 

            En China. Según asegura persecution.org., siete cristianos chinos permanecen injustamente detenidos más de un año después de su detención, producida el pasado 14 de abril de 2012, falsamente acusados del delito de organizar el culto, cuando simplemente se hallaban leyendo la Biblia. El pasado 1 de abril, los cristianos fueron sentenciados a penas que van desde los tres a los siete años y medio de prisión. Se da la circunstancia de que las autoridades negaban información sobre las condiciones en las que se hallaban los detenidos a sus familiares.

 

            En Marruecos. Según informa Protestante Digital, una iniciativa online en la web Avaaz, una de las principales del mundo en el campo de las campañas ciudadanas, busca reunir cinco mil firmas reclamando la libertad del cristiano Mohamed El Baldi, condenado en Tanuat a 30 meses de cárcel desde el pasado 28 de agosto, acusado de proselitismo cristiano. Vendedor de Ain Aicha, en el norte de Marruecos, Mohammed fue acusado de “tambalear” la fe de un menor musulmán. La petición señala como “vergonzoso, injusto e inapropiado” el texto de artículo 220 del código penal, que establece multas y penas de cárcel para quien “sacuda la fe de un musulmán”.

 

            En Irak, la buena noticia. Según afirma Protestante Digital, el pastor protestante Ali Abdi Hamzah, conocido como Pastor Jamal, ha recibido el indulto presidencial después de pasar veintiún meses en la cárcel, acusado de espionaje a favor de Irán, aunque la verdadera razón de su detención podría estar relacionada con su conversión al cristianismo. Durante su estancia en prisión, Jamal convirtió a 28 personas. “Es la primera vez que se concede un indulto a un musulmán convertido al cristianismo”, ha declarado Terry Law, fundador de World Compassion Terry Law Ministries. En la liberación de Jamal ha desempeñado también un importante papel la implicación del senador estadounidense James M. Inhofe.

 

            En Canadá. Según informa christinophobie, una estatua de Jesús de la iglesia de Saint-Sauveur de Val-d’Or en Québec ha sido salvajemente mutilada mediante la amputación de su brazo derecho. La policía de Québec busca a los autores de la profanación. Los daños se elevan a varios miles de dólares.

 

 

 

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