Sustituye al cardenal Harvey tras 16 años
Georg Gänswein, secretario del Papa, nuevo prefecto de la Casa Pontificia y arzobispo
Tras el caso Vatileaks, Benedicto XVI continúa configurando un entorno próximo de su máxima confianza.
Este viernes la Oficina de Prensa del Vaticano ha dado a conocer el nombramiento de Georg Gänswein como prefecto de la Casa Pontificia, elevándole al mismo tiempo al arzobispado.
Hasta ahora monseñor Gänswein, alemán de 56 años, ejercía como secretario personal de Benedicto XVI, cargo que desempeña desde 1996, asistiendo al cardenal Joseph Ratzinger en la Congregación para la Doctrina de la Fe. Al informar del nombramiento, el padre Federico Lombardi, director de la Oficina de Prensa del Vaticano, apuntó a que podría simultanear ambos cargos.
Ordenado sacerdote en 1984 e incardinado en la diócesis de Friburgo, Gänswein es licenciado en Derecho Canónico y trabajó durante años en el tribunal diocesano como juez, hasta ser transferido en 1995 a la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, justo en la transición entre el cardenal Antonio María Javierre y el cardenal Jorge Medina.
Habla, además de su alemán natal, inglés, francés, español e italiano, y tiene un buen dominio del latín.
Gänswein es una de las personas de la máxima confianza del Papa, y uno de los ejes clave en la gestión de la crisis de los Vatileaks. Sustituye al cardenal norteamericano James Michael Harvey, uno de los capelos creados en el consistorio del 24 de noviembre, quien había sido prefecto de la Casa Pontificia desde 1998.
La misión de la Prefectura es ordenar el servicio de antecámara y organizar las audiencias solemnes que el Papa concede a los jefes de Estado, presidentes de Gobierno y otras personalidades eminentes, así como a los embajadores que llegan al Vaticano para presentar sus cartas credenciales.
Asimismo dispone lo que se refiere a las ceremonias pontificias -excepto la parte estrictamente litúrgica-, a los ejercicios espirituales del Santo Padre, del Colegio Cardenalicio y de la Curia Romana.
De igual modo, compete a la Prefectura disponer los preparativos necesarios y oportunos cada vez que el Santo Padre sale del Palacio Apostólico a Roma o viaja por Italia.
Hasta ahora monseñor Gänswein, alemán de 56 años, ejercía como secretario personal de Benedicto XVI, cargo que desempeña desde 1996, asistiendo al cardenal Joseph Ratzinger en la Congregación para la Doctrina de la Fe. Al informar del nombramiento, el padre Federico Lombardi, director de la Oficina de Prensa del Vaticano, apuntó a que podría simultanear ambos cargos.
Ordenado sacerdote en 1984 e incardinado en la diócesis de Friburgo, Gänswein es licenciado en Derecho Canónico y trabajó durante años en el tribunal diocesano como juez, hasta ser transferido en 1995 a la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, justo en la transición entre el cardenal Antonio María Javierre y el cardenal Jorge Medina.
Habla, además de su alemán natal, inglés, francés, español e italiano, y tiene un buen dominio del latín.
Gänswein es una de las personas de la máxima confianza del Papa, y uno de los ejes clave en la gestión de la crisis de los Vatileaks. Sustituye al cardenal norteamericano James Michael Harvey, uno de los capelos creados en el consistorio del 24 de noviembre, quien había sido prefecto de la Casa Pontificia desde 1998.
La misión de la Prefectura es ordenar el servicio de antecámara y organizar las audiencias solemnes que el Papa concede a los jefes de Estado, presidentes de Gobierno y otras personalidades eminentes, así como a los embajadores que llegan al Vaticano para presentar sus cartas credenciales.
Asimismo dispone lo que se refiere a las ceremonias pontificias -excepto la parte estrictamente litúrgica-, a los ejercicios espirituales del Santo Padre, del Colegio Cardenalicio y de la Curia Romana.
De igual modo, compete a la Prefectura disponer los preparativos necesarios y oportunos cada vez que el Santo Padre sale del Palacio Apostólico a Roma o viaja por Italia.
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