Acusados de participar en una «reunión ilícita»
Arabia Saudí detiene, veja y deporta a 35 cristianos por reunirse a rezar
Mientras financia un centro de diálogo interreligioso en Viena apoyado por España.
La organización Human Rights Watch ha denunciado la detención y próxima deportación de 35 cristianos etíopes por haberse reunido para rezar juntos en una casa de Yedá a mediados del pasado mes de diciembre, bajo la acusación de haber participado en una «reunión ilícita». En un comunicado, la ONG ha indicado que 29 de los detenidos son mujeres y que los arrestados fueron sometidos a registros corporales «arbitrarios», según el testimonio aportado por tres de los cristianos etíopes.
HRW ha explicado que los 35 cristianos etíopes se reunieron el pasado 15 de diciembre para celebrar el Adviento previo a la Navidad en el domicilio de uno de ellos, en el que la Policía irrumpió y procedió a detenerlos. Así lo han confirmado a HRW tres de los detenidos, dos mujeres y un hombre.
«Mientras el rey Abdulá crea un centro de diálogo interreligioso internacional, su Policía está pisoteando los derechos de los creyentes de otras religiones», ha denunciado el investigador especializado en Oriente Próximo de HRW Christoph Wilcke. En su opinión, «el Gobierno saudí necesita cambiar sus propios modos intolerantes antes de poder promover un diálogo interreligioso en el extranjero». El pasado mes de octubre, Arabia Saudí, España y Austria acordaron la creación del Centro Internacional para el Diálogo Interreligioso e Intercultural Rey Abdulá bin Abdulaziz, con sede en Viena (Austria) y financiado con capital saudí.
HRW ha explicado que los 35 cristianos etíopes se reunieron el pasado 15 de diciembre para celebrar el Adviento previo a la Navidad en el domicilio de uno de ellos, en el que la Policía irrumpió y procedió a detenerlos. Así lo han confirmado a HRW tres de los detenidos, dos mujeres y un hombre.
«Mientras el rey Abdulá crea un centro de diálogo interreligioso internacional, su Policía está pisoteando los derechos de los creyentes de otras religiones», ha denunciado el investigador especializado en Oriente Próximo de HRW Christoph Wilcke. En su opinión, «el Gobierno saudí necesita cambiar sus propios modos intolerantes antes de poder promover un diálogo interreligioso en el extranjero». El pasado mes de octubre, Arabia Saudí, España y Austria acordaron la creación del Centro Internacional para el Diálogo Interreligioso e Intercultural Rey Abdulá bin Abdulaziz, con sede en Viena (Austria) y financiado con capital saudí.
Comentarios