La fe constitucionalista también tiene su herejía protestante

 
Este Sistema, como sistema totalitario que es, pretende abarcar y copar todos los ámbitos sociales y personales. También los espirituales.

El Sistema se quiere constituir también en religión, en el sentido de proporcionar las creencias y prácticas acerca de lo considerado como divino o sagrado, tanto a nivel personal como colectivo, buscando marcar la moralidad de las  pautas de comportamiento de tipo existencial, ético y espiritual para la sociedad española

Y como religión que es, aunque sea religión atea, tiene sus textos sagrados, sus dogmas, su liturgia y su mística. Y hasta, como dice Berdiaeff, su "gracia", en el sentido espiritual del vocablo.

El Sistema sustituye el Evangelio por la Constitución como texto de referencia.

Y como toda religión que se precie también tiene sus sistemas de vigilancia de la pureza de la fe constitucionalista, sustituyendo al Tribunal del Santo Oficio con ventaja en su intrusividad en la vigilancia de la sociedad en general y de los individuos en particular y, sobre todo, en la coactividad de sus instrumentos de castigo.

Para ello la constitución republicana liberal relativista del 31 disponía de la Ley de Defensa de la República y de la Ley de Orden Público.

 

La Constitucion monarquica liberal relativista del 78 tiene establecido un procedimiento, que ni siquiera es necesario desarrollar en una ley pues sus características y competencias vienen plasmadas en la misma constitución.,

Los doctores que tiene la iglesia (constitucional) en este caso, tal como indica la propia Constitución, en su TITULO IX, es el Tribunal Constitucional (no otro, ni otras opiniones),  que es el órgano competente para determinar lo que es constitucional y lo que es inconstitucional, es decir lo que está amparado por la Constitución y lo que está fuera de la Constitución.

Lo que es ortodoxo y lo que es herejía.

En todas las religiones la mayor parte de las heterodoxias nacen por la soberbia de algunos de sus seguidores que, considerándose especiales, piensan que las normas generales no van con ellos, y se arrogan el derecho de interpretar los textos sagrados.

Básicamente en eso consistió la herejía protestante.

Las doctrinas de las diversas ramas protestantes varían, pero son prácticamente únanimes en considerar que la Iglesia es innecesaria pues ellos son capaces de establecer de forma directa la relación con Dios en base a su libre interpretación de la Biblia, sin instituciones intermedias.

Lutero quema la bula papal. El puede interpretar la Biblia sin necesidad de la autoridad de la Iglesia

Pues bien, la herejía protestante ha llegado a la  religión constitucionalista

Los "protestantes" de la religión constitucionalista principalmente son, paradojicamente, los católicos liberales y los nacionalistas

Entre los católicos destacan algunos obispos y los democristianos, que se empeñan en manipular la constitución saltándose la verdad constitucional definida por el Tribunal Constitucional e insisten, por ejemplo, en decir que la Constitución no es abortista [*] y además pretenden suplantar el papel de interpretes (hacen con la Constitución lo mismo de lo que se quejan cuando los "teólogos" sedicentes le quitan el papel a los dicasterios romanos, p.e., de interpretar el Vaticano II).

El empeño de los cristianos liberales en decir que según que leyes bárbaras no son constitucionales se basa en que han asumido el discurso positivista del Sistema y deificado la Constitución.

Y piensan que lo que es constitucional (y legal) es bueno (y legítimo). 

Pero como todavía mantienen cierta sensibilidad humana y un subconsciente cristiano, que les dice que, p.e., el aborto es malo, hacen un acto de voluntarismo irracional para pensar que el aborto no puede ser constitucional.

Los que niegan el caracter abortista de la Constitución ratificado por el tribunal constitucional son análogos a los protestantes que niegan los dictámenes de la Sagrada Congregación de la Romana y Universal Inquisición, actualmente Congregación para la Doctrina de la Fe

Y entre los nacionalistas y separatistas los protestantes de la fe constitucional lo suelen ser todos, no tanto en la parte de valores filosóficos de la Constitición, que asumen plenamente, sino en la parte "administrativa" que indica quien se encaga de ejerecer control y el poder.

Un poco, en vez del luteranismo, como el anglicanismo primero y la Hight Church, que conservaba la mayor parte de los dogmas pero tenían que ser controlados e interpretados por el rey ingles, local, frente al Papado.

Así los nacionalistas insisten en que los nuevos estatutos de autonomía son constitucionales a pesar de que el Santo Oficio del Sistema, el Tribunal Constitucional dicta sentencia señalando la inconstitucionalidad de muchos de sus contenidos.

Vemos pues que los protestantes de la fe constitucionalista, católicos liberales y nacionalistas, coinciden en revindicar la Constitución, pero "a la carta", como los luteranos y anglicanos hicieron en el siglo XVI, que se consideraban los más cristianos, pero sin aceptar la autoridad legítima.

Pero estos herejes de la fe constitucionalista, que al igual que los protestantes del XVI, según decían, no cuestionaban el cristianismo, sino que lo que buscaban era depurarlo,  lo hacen con la intención de perfeccionar la fe constitucionalista, de la que no reniegan sino que quieren adoptar a su gusto.


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[*] http://www.religionenlibertad.com/articulo.asp?idarticulo=4569
www.religionenlibertad.com/articulo.asp?idarticulo=5962
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