De la figura de Jesús en el Corán
por Luis Antequera
La presencia de Jesús en el libro santo de los musulmanes arrastra la de otros personajes bien conocidos del lector evangélico, entre los cuales San Juan Bautista, los apóstoles y notablemente, su madre, la Virgen María, mencionada en hasta treinta y tres ocasiones, bien es verdad que, de ellas, sólo once como personaje autónomo, y las otras veintidós para caracterizar a su hijo, Jesús hijo de Maria. Un honor, éste de ser llamada por su nombre, que el Corán dispensa a una única mujer, María precisamente, y que ni siquiera cabe a la madre del Profeta o a ninguna de sus quince esposas: ni Jadicha, la primera y más importante, ni Aisha, la favorita.
El Corán contiene toda una cristología, que comienza con el nacimiento de Jesús y termina con su pasión, inspirados en el relato cristiano, con el que sin embargo, registra importantes diferencias, como, concretamente, la concerniente a la relación existente entre Jesús y Allah-Dios, y sazonada con curiosos episodios procedentes del mundo de la literatura apócrifa cristiana, algo que no deja de llamar poderosamente la atención.
Y todo ello dentro de un sentimiento tanto hacia los seguidores de Jesús como hacia sus compatriotas judíos que se ha de calificar, como poco, de tornadizo y veleidoso.