Más comprometido con la telefónica que con la esposa.
por Manuel Morillo
Hoy se cumple el cuarto aniversario de la popularmente conocida como ley del "divorcio express"
Oficialmentge se trata de la Ley 15/2005 por la que se modifican el Código Civil y la Ley de Enjuiciamiento Civil en materia de separación y divorcio (Referencia BOE 2005/11864)
Contó, ¡qué sorpresa!, con la ratificación de Juan Carlos de Borbón el 8 de julio de 2005 y fué publicada en el BOE de 09/07/2005
Su Exposición de Motivos lleva íntríseca un auténtico plan de desarrollo de "reingenieria social", que busca degradar la institución del matrimonio, de derecho natural, configurándola como un contrato de segundo orden, en la que ni siquiera se tiene la seguridad jurídica del cumplimiento por las partes.
Con esta ley el matrimonio compromete por menos tiempo que, por ejemplo, un contrato de permanencia con una compañía de telecomunicaciones.
Esta ley ha causado escándalo y ha sido "repudiada" por los "conservadores" y "centroreformistas", pero en realidad es el desarrollo natural en el tiempo del artículo 32 de la Constitución de 1978 y de la Ley 30/1981, de 7 de julio, (legislación impulsada y aprobada con gobiernos de "centroderecha" de la UCD y siendo presidentes Adolfo Suárez y Leopoldo Calvo Sotelo respectivamente).
Cuando se ha protestado contra la ley de "divorcio express" en el enfoque de la forma de denuncia implícitamente se ha dado por "buena" y moderada la ley de divorcio anterior.
Es la misma relación que va a ocurrir entre la ley del aborto 5 de Julio del 85 y la próxima con que amenaza el gobierno.
De momento los partidos políticos centrorreformistas y las "organizaciones de la sociedad civil" cómplices (muchas de ellas organizaciones pantalla satélites ) ya no piden la derogación de toda legislación abortista sino sólo de las nuevos supuestos basados en los plazos.